Es por eso, que aquellas personas que han sido llamadas a este ministerio deben tener mucho equilibrio y cuidar su corazón y su llamado. ¿Qué tanta carga has sentido? ¿Qué pasaría si tu vida se convierte en resolver el ministerio de niños, pero te olvidas de tu relación personal con Jesús?
El Señor te ha dado un lugar de privilegio, y por eso debes ser ejemplo también de llevar una vida equilibrada. En este blog solamente queremos recordarte qué áreas de tu vida debes cuidar, pero también te dejaremos algunos consejos si sientes que has venido llevando mucho peso sobre tus hombres.
Áreas para tener una vida equilibrada
Tu relación personal con Jesús: Nunca el trabajo ministerial puede estar por encima de nuestra relación personal con Jesús. Si nos desconectamos de Él, ¿qué estamos dando a los niños y a nuestro equipo de servicio?
Preguntas de diagnóstico?
¿Tienes tu tiempo devocional a diario?
¿Lees la Biblia al menos una vez al año?
Tu salud y tus emociones: Si el ministerio de niños te produce afán, frustración o tal vez has perdido el brillo y la alegría, debes revisar lo que está sucediendo.
Consejos
Busca a tu pastor para que pueda ministrarte
Piensa si tal vez necesitas un tiempo de recarga antes de seguir
Tu familia: Un líder de niños debe ser testimonio en su casa, nuestro hogar es nuestro primer ministerio, evalúa si has tenido suficiente tiempo y ánimo para dedicarles, también que todas tus relaciones estén de acuerdo a lo que enseña la Palabra de Dios.
Tu iglesia: Es importante que estés cumpliendo con el llamado y la misión de tu iglesia y que no te aísles solamente al trabajo del ministerio de niños. Sería muy curioso si trabajar en la iglesia nos aleja de lo que es la iglesia!
Todo lo demás
Ahora, la gran pregunta es ¡cómo puedes lograrlo! Acá te dejamos algunos consejos.
Se honesto contigo mismo y no te aferres a una posición
Normalmente al ser pastores o coordinadores del ministerio infantil contamos con la confianza y el respaldo de nuestro pastor principal. También es probable que tengamos la experiencia para poder sacar el ministerio adelante, pero tal vez nadie conoce cómo está tu vida espiritual.
En esto es importante que seas honesto, si te ha costado mantener tu vida devocional, si de pronto te has sentido sobrecargado, no te quedes en silencio, busca apoyo, la iglesia sin dudas es el mejor lugar para encontrarlo. No tengas temor de perder una posición, todo esto lo hacemos para poder servir al Señor de una manera íntegra.
Aprende a formar equipos de trabajo
El trabajo del ministerio de niños es muy amplio, es como tener una pequeña iglesia a tu cargo. Lo mejor que puedes como decía el pasaje que compartimos empezando este blog es formar equipos de trabajo. Tienes que aprender a seleccionar y formar personas que tengan el mismo llamado y amor por la obra. Así podrán repartirse las cargas y todos tendrán una vida más equilibrada.
Si quieres aprender un poco más puedes revisar el blog: Cómo formar el mejor equipo de voluntarios para el ministerio de niños
Aprende a delegar responsabilidades
Tener un equipo es el primer paso, pero aprender a soltar y delegar responsabilidades es ir un paso más allá. Muchas veces podemos sentir que solo nosotros entendemos la responsabilidad del servicio, pero si Dios te rodea de personas fieles, debes confiar en que van a poder hacer el mismo o incluso un mejor trabajo del que tú harías.
Delegar te va a ayudar a que cada persona encuentre su sweet spot dentro del ministerio y te permitirá un poco más de libertad -no tener que estar en el detalle- para que puedas tener un mejor panorama de tu ministerio.
Pon estos consejos en práctica y de seguro verás grandes resultados. Recuerda que el anhelo del Señor no es presionarte, sino que toda tu vida y tu llamado puedan brillar con excelencia.